El Palacio de los Deportes fue testigo de un show épico a manos de Bring Me The Horizon, Ice Nine Kills, Motionless in White, Black Veil Brides y Blnko.
Por: Kather Islas
No fue sorpresa para nadie que los boletos se agotaran tan rápidamente cuando se anunció el regreso de la banda inglesa Bring me the Horizon a nuestro país, y es que no venían solos sino acompañados de la Trinity of Terror: Ice Nine Kills, Motionless in White y Black Veil Brides; y aunque la espera parecía infinita, no hay plazo que no se cumpla y los fans fueron recompensados con un show que será muy difícil de olvidar.
Blnko, músico nacido en Guadalajara, Jalisco, fue el último artista en unirse al cartel y el encargado de abrir el show, dándole la bienvenida a aquellos fans que llegaron temprano intentando encontrar un lugar en el frente y demostrando el talento nacional.
Halloween se adelantó cuando los chicos de Ice Nine Kills salieron a escena, haciendo gala de su concepto se presentaron ante el público mexicano con algunos accesorios acordes a la cultura pop del terror mientras interpretaban temas como Funeral Derangements, Stabbing in the Dark o Welcome to Horrorwood, y aunque fue necesario parar el show por un momento para controlar al público que ya empezaba a empujarse, esto no apagó el ánimo de los músicos que se despidieron de su fans con The American Nightmare.
Los originarios de Pensilvania, Motionless In White fueron los siguientes en reclamar el escenario, detrás de ellos la pantalla proyectaba una animación con la portada de su última producción discográfica Scoring the End of the World lanzada este año, y aunque el público coreaba todas y cada una de sus canciones, sin duda el momento cumbre fue cuando Somebody Told Me originaria de The Killers comenzó a sonar, el cover consiguió que hasta aquellos que iban llegando se apresuraran a entrar para poder cantar este peculiar cover a todo pulmón. Al final Chris Cerulli, vocalista de la banda, dio las gracias a los fans bajándose del escenario y acercándose lo más que pudo a ellos.
Black Veil Brides fueron los últimos de la Trinity of Terror en salir a escena, desgraciadamente su inicio fue poco afortunado ya que el micrófono de Andy Biersack presentó algunos problemas de sonido, pero más que desanimar al vocalista esto sólo hizo que intentara conectar más con su público, ya que de las tres bandas ellos fueron los que tuvieron una interacción más directa con los fans, a la mitad de su set dejó de cantar en un par de ocasiones sólo para verificar que algún fan atrapado en el mosh pit estuviera bien y no retomaba el show hasta comprobar que todo estuviera en orden, y es que por más que el personal de seguridad trataba de evitar que hubiera empujones era imposible poder controlar a la multitud, pero Andy logró con un par de intervenciones lo que los mensajes en las pantallas no hicieron nunca. Incluso jugó un poco con los fans al hacer un trato: si querían que se quitara la camisa debían gritar “We scream, we shout” parte del coro The Fallen Angels lo más fuerte que pudieran y el público mexicano no decepcionó así que las últimas dos canciones de su set las cantó topless. Se despidieron con In the End dando las gracias por la asistencia y sorprendidos de poder tocar ante un público tan grande.
Y al fin llegaba el momento más esperado de la noche, Bring me the Horizon llegó elegantemente tarde al escenario pero no hubo forma de reclamar, no cuando su show empezó muchísimo antes de que la banda saliera a escena, un androide femenino dio el banderazo de salida, mientras un dron recorría las diversas zonas del palacio de los deportes grabando a los emocionados fans. Y es que algo que debo aplaudirles fue el que hicieran al público participantes directos del show, ya que durante el discurso del androide, las pantallas se llenaron con los rostros de los asistentes y la cámara “escaneaba” a los fans y señalaba algunos cuantos objetivos dándole más realismo a la historia que nos contaban en las pantallas, todo comenzó con Can You Feel My Heart y una lluvia de corazones de papel.
Happy song, Teardrops y MANTRA siguieron después, mientras el dron seguía dando vueltas y grabando todo lo que sucedía entre los asistentes que se dejaban el alma cantando a la par de Oliver Sykes quien demostró lo que ya se sabía, que es un excelente frontman y es que alineaba su discurso con las canciones a interpretar, preguntó quiénes los estaban viendo por primera vez para después añadir “por favor no seamos extraños” acto seguido, su canción sTraNgeRs comenzó. O como olvidar su emotivo discurso antes de DiE4u “México, ustedes han salvado mi vida muchas veces, ustedes son la razón de que esta banda exista y yo moriría por ustedes”, lo visuales durante Parasite Eve cortaron la respiración y fue imposible no pensar en los videojuegos de Resident Evil.
La noche terminó demasiado pronto, después de un pequeño encore y con unos ligeros cambios en el setlist que venían presentando, la banda inglesa se despidió de sus fans con Obey y Throne dando así por terminada una presentación épica que demostró la razón por la cual Bring me the Horizon sigue siendo una de las bandas más importantes dentro de la escena metalcore a nivel mundial.
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